1. RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS

Resolveremos problemas o nos enfrentaremos a distintos tipos de retos de forma recurrente a lo largo de nuestros días y nuestras carreras profesionales, por lo que desarrollar buenas habilidades de resolución de problemas nos proporcionará una importante ventaja competitiva a la hora de idear y aplicar soluciones.

En este sentido, la resolución de problemas puede definirse sintéticamente como el proceso de trabajar las distintas facetas de un problema para llegar a una solución satisfactoria. Se trata de una habilidad aplicable a multitud de contextos y desafíos a los que nos enfrentamos continuamente en nuestra vida personal y profesional y, para ser realmente eficaz, requiere un marco de resolución de problemas que pueda adaptarse como hoja de ruta para hacer frente a diferentes circunstancias.

Una mentalidad centrada en la resolución de problemas puede relacionarse con un Enfoque Centrado en las Soluciones (SFA). Este término, procedente del ámbito de la terapia, supone que el individuo se centra en la solución, en lugar de en el problema, lo que supone un cambio de paradigma hacia un enfoque más positivo y orientado a la solución para poner en marcha planes de acción correctivos, en lugar de centrarse específicamente en qué barreras, obstáculos o retos se están afrontando.

Para saber más sobre lo esencial del SFA, puedes echar un vistazo a los siguientes recursos:

¿Cómo crees que este tipo de mentalidad, junto con la capacidad para resolver problemas, podría impulsar tu (futura) carrera como emprendedor/a social?

2. MARCO DE RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS

Como se ha mencionado anteriormente, para desarrollar y poder aplicar las habilidades de resolución de problemas en el día a día, es necesario contar con el apoyo de un marco de resolución de problemas preestablecido. Es decir, una hoja de ruta estratégica que nos ayude a identificar y explorar el problema, y a idear posibles soluciones para el mismo, y que sea aplicable a diferentes escenarios y nos proporcione una guía para el diagnóstico y la toma de decisiones necesarias.

Aquí tienes un enfoque muy sencillo y directo, pero te animamos a que explores otras herramientas para desarrollar tus habilidades de resolución de problemas.

  • Define el problema:
    • ¿Cuál es la situación real que hay que resolver?
    • ¿Qué se sabe de ella?
    • ¿Qué no se sabe?
    • ¿Cuáles son sus causas?
    • ¿Cuáles serían las consecuencias problemáticas de una resolución fallida?
  • Reflexiona sobre el problema, lo que implica:
  • Analiza el problema durante un rato (siempre que sea posible) para verlo desde diferentes perspectivas. Esto puede hacerse utilizando técnicas de creatividad como las 5W y H, o los Seis Sombreros para Pensar.
  • Comparte el problema con otras personas para obtener nuevas perspectivas.
  • Recopila información adicional que pueda ser útil para idear una solución.
  • Idea una solución viable:
  • Aplicar técnicas de creatividad para llevar a cabo un proceso de ideación sobre posibles soluciones puede ser una estrategia muy adecuada. Piensa, por ejemplo, en el brainstorming.
  • Evalúa diferentes opciones de solución de problemas:
    • ¿Cuál es la solución más viable?
    • ¿Cuáles podrían ser los efectos secundarios de cada una de ellas?
    • Diseña un plan de aplicación de la solución en función de las limitaciones del problema.
  • Aplica la solución y evalúa los resultados obtenidos.

Tras tomar la decisión y llevar a cabo el plan de resolución de problemas, hazte, entre otras, las siguientes preguntas para fomentar tu proceso de autoaprendizaje:

  • ¿Tiene sentido la solución a la pregunta/problema/desafío?
  • ¿Se ajusta a los criterios de resolución según el problema?
  • ¿He alcanzado mis objetivos?
  • ¿Qué he aprendido al hacerlo?
  • ¿Podría haber resuelto el problema de otra manera?

Aquí puedes encontrar un montón de inspiración sobre diferentes marcos de trabajo:

3. BENEFICIOS DE LA RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS

La resolución de problemas desempeña un papel fundamental a la hora de ayudarnos a hacer frente a la adversidad y la incertidumbre al disponer de las herramientas de diagnóstico y toma de decisiones necesarias para hacer frente a posibles contratiempos.

Por lo tanto, esto es crucial para cualquier emprendedor/a  o empresa social, ya que en general se reconoce que se trata de un camino difícil que requiere una toma de decisiones frecuente y adaptabilidad ante los cambios/problemas.

Igualmente:

  • La resolución de problemas es un vehículo impulsor del desarrollo de la creatividad y el pensamiento lateral, ya que idear soluciones fomenta la innovación y la capacidad de analizar diferentes oportunidades. Por lo tanto, también se puede potenciar el pensamiento crítico y facilitar la toma de decisiones a medida que se entrena esta competencia.
  • Como ya hemos señalado, la práctica continua y estratégica de la resolución de problemas fomenta el desarrollo de una mentalidad SFA en el (futuro) lugar de trabajo. Esto se debe también a que enfrentarse a retos y tener éxito o aprender de los propios errores fomenta el sentido de la responsabilidad, la confianza en uno mismo/a y el espíritu emprendedor.

4. CÓMO IMPULSAR TUS HABILIDADES DE RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS

Como en el caso de la creatividad, el pensamiento crítico o el trabajo en equipo, las propias habilidades para resolver problemas pueden entrenarse y mejorarse como un músculo.

No hay mejor manera de ampliar tus conocimientos y habilidades que ejercitándolas: ¡cada nuevo reto u obstáculo que superar es una importante oportunidad de aprendizaje!

He aquí unos breves consejos que pueden ser útiles para este fin:

  1. Como siempre, el primer paso para desarrollar tus habilidades de resolución de problemas es dedicar tiempo a reflexionar sobre el autoconocimiento y la autoevaluación. Intenta identificar tus puntos débiles y elabora planes de acción para reforzarlos. Si es necesario, puedes pedir opinión a quienes te conocen bien para identificar esas áreas de mejora.
  2. También puedes dedicar algún tiempo a explorar distintos enfoques o metodologías de resolución de problemas que mejor se ajusten a tu visión empresarial y a tu estilo de liderazgo preferido. De este modo, cuando te enfrentes a un nuevo (potencial) problema, dispondrás de los recursos y el plan de acción para abordarlo con eficacia.
  3. Ten en cuenta que puede que necesites adaptar o reajustar tu marco de resolución de problemas a medida que te vuelvas más avanzado/a y experto/a.
  4. Puedes emplear elementos sencillos de gamificación para poner a prueba tus habilidades de resolución de problemas durante tu tiempo libre. Por ejemplo, puedes utilizar “juegos serios” en línea como scape rooms para desarrollar el pensamiento lateral y estratégico.

5. RECURSOS ADICIONALES

Ir al contenido