1. LIDERAZGO

No existen los “líderes natos”. El liderazgo es un atributo adquirido que comienza en la escuela y en el patio de recreo. Con el paso del tiempo, la educación, el trabajo y las experiencias vitales conforman la filosofía y la psicología de un/a líder.

El psicólogo Daniel Goleman describió seis estilos de liderazgo diferentes:

  1. Liderazgo visionario – moviliza al equipo hacia una visión común y se centra en los objetivos finales, dejando los medios en manos de cada individuo. Si este estilo se resumiera en una frase, sería algo así como una invitación:”ven conmigo”. Este estilo funciona mejor cuando el equipo necesita una nueva visión porque las circunstancias han cambiado, o cuando no se requiere una orientación explícita. No es el más adecuado cuando el/la líder trabaja con un equipo de expertos que saben más que él o ella.
  2. Liderazgo afiliativo – crea conexiones entre las personas y, por tanto, armonía dentro de la organización. Es un estilo muy colaborativo que se centra en las necesidades emocionales por encima de las laborales. Si este estilo se resumiera en una frase, sería “las personas son lo primero”. El estilo afiliativo funciona mejor en momentos de estrés, cuando los compañeros necesitan curarse de un trauma o cuando el equipo necesita reconstruir la confianza.
  3. Liderazgo coach – desarrolla a las personas para el futuro bajo un estilo “prueba esto”. El estilo coaching funciona mejor cuando el/la líder quiere ayudar a los compañeros de equipo a construir fortalezas personales duraderas que les hagan más exitosos en general. Es menos eficaz cuando los compañeros de equipo no están dispuestos a cambiar o aprender, o si el/la líder carece de competencia.
  4. Liderazgo democrático – crea consenso a través de la participación. Si este estilo se resumiera en una frase, sería “¿qué te parece?”. Este estilo es más eficaz cuando el/la líder necesita que el equipo se sume a una decisión, plan u objetivo, o si necesita ideas nuevas de compañeros cualificados. No es la mejor opción en una situación de emergencia o cuando los compañeros de equipo no están lo suficientemente informados como para ofrecer suficiente orientación a su líder.
  5. Liderazgo que marca el ritmo – crea retos y objetivos emocionantes para las personas, esperando la excelencia y, a menudo, ejemplificándola él/ella mismo/a. Identifica a los que no rinden y les exige más. Si este estilo se resumiera en una frase, sería “haz lo que yo hago, ahora”. Este estilo “marcapasos” funciona mejor cuando el equipo ya está motivado y capacitado, y el/la líder necesita resultados rápidos. Sin embargo, si se utiliza mucho, este estilo puede abrumar a los miembros del equipo y aplastar la innovación.
  6. Liderazgo autoritario – exige un cumplimiento inmediato: “haced lo que os digo”. Este es el modelo clásico de liderazgo de estilo “militar”, probablemente el más utilizado, pero el menos eficaz. Dado que rara vez implica elogios y con frecuencia emplea la crítica, mina la moral y la satisfacción en el trabajo. Sin embargo, puede ser eficaz en tiempos de crisis o durante una emergencia real. Este estilo también puede ayudar a controlar a un compañero problemático cuando todo lo demás ha fallado. Sin embargo, debe evitarse en casi todos los demás casos.

No obstante, por supuesto, existen otros estilos de liderazgo, como el colaborativo (véase la siguiente sección para saber más sobre este estilo), el burocrático (centrado en cada norma), el orientado a la tarea (centrado en hacer el trabajo), el transformacional (que inspira esperando lo mejor de todos y de sí mismo/a), etc.

A menudo asociamos el liderazgo con un papel muy visible y popular que da reconocimiento y estatus, sin embargo un/a líder de éxito puede tener características bastante opuestas.

En este sentido, por ejemplo, algunos grandes líderes mundiales como M.K. Gandhi y Abraham Lincoln siempre antepusieron su visión a su ego. Parecían personas tímidas e indefensas en su forma de ser y de hablar, pero no lo eran tanto cuando se trataba de actuar. Esto se conoce a veces como liderazgo de Nivel 5. Los líderes de Nivel 5 son modestos pero intrépidos, y poseen la capacidad de transformar una organización de buena a grande.

BENEFITS OF COLLABORATIVE LEADERSHIP

El liderazgo colaborativo es una fuente cada vez más vital de ventaja competitiva en los entornos empresariales actuales, altamente interconectados, basados en el trabajo en equipo y orientados a la asociación. Para un/a empresario/a social o una ONG, el liderazgo colaborativo es un enfoque que sin duda merece la pena considerar.

Los líderes colaborativos suelen buscar una multiplicidad de opiniones e ideas entre sus colegas para solucionar problemas y establecer estrategias. Gracias a este liderazgo colaborativo, el personal se compromete más, adquiere más confianza en sí mismo y está más predispuesto a apropiarse de sus tareas y responsabilidades.

 

 

Fuente: https://cabreramc.com/liderazgo-colaborativo-empatia-trabajo-influencia-liderazgo-adaptacion-cambio/

Una actitud de colaboración hacia el liderazgo en un equipo o una organización tiene muchas ventajas, como son:

  • La gente está más dispuesta a asumir responsabilidades
  • Un entorno abierto fomenta la libre circulación de ideas, y las soluciones son mejores que las adoptadas por un único líder
  • El liderazgo colaborativo fomenta la confianza entre los miembros del equipo
  • Eliminación de la competitividad destructiva interna, con lo que se consigue un mejor trabajo en equipo
  • Comprensión común del propósito de la organización, y mayor compromiso.
  • Aumento de la lealtad de los empleados
  • Creación de futuros líderes colaborativos desde dentro de la organización

3. HABILIDADES DE LIDERAZGO

Las habilidades de liderazgo son muy codiciadas, ya que implican tratar con la gente de tal manera que motive, entusiasme y genere respeto.

Aunque la capacidad de dirigir con eficacia depende de una serie de habilidades clave, los distintos líderes tienen características y estilos muy diferentes.

Hay una serie de habilidades que la mayoría de los/as líderes poseen o, más a menudo, en las que todavía están trabajando, entre las que se incluyen:

  • Pensamiento estratégico
  • Confianza en sí mismo/a
  • Motivación
  • Innovación
  • Flexibilidad
  • Toma de decisiones
  • Comunicación

Parte del liderazgo consiste en aceptar la necesidad de mejorar continuamente y desarrollar una mentalidad de aprendizaje. Echa un vistazo a las otras fichas de SPORTS INC para aprender más sobre las diferentes habilidades que son esenciales en el liderazgo, como por ejemplo: comunicación, flexibilidad, pensamiento estratégico,… ¡y muchas más!

4. CÓMO IMPULSAR TUS HABILIDADES DE LIDERAZGO

¿Cómo puedes desarrollar tus habilidades y tu estilo de liderazgo? Aquí tienes 6 pasos que puedes seguir:

Paso 1. Identifica tu estilo de liderazgo de preferencia
Considera hacer los siguientes cuestionarios online para tener una mejor idea sobre tu estilo de liderazgo:

Test de estilos de Liderazgo de Blake and Mouton

Test de Liderazgo Kurt Lewin

 What Sort of Leader are You? (recurso en inglés)

Paso 2. Identifica y desarrolla tus fortalezas
Aunque tengas un estilo de liderazgo preferido, lo más probable es que también tengas otras habilidades valiosas. Puedes preguntar a tus colegas o amigos qué es lo que consideran mejor de tu liderazgo. Aprovechar tus puntos fuertes es importante.

Paso 3. Trabaja en tus debilidades
Ahora tienes que pensar en los estilos que se te dan peor pero te resultan de interés y desarrollarlos. Observar a los demás y aprender de ellos es una buena forma de aprender. Al principio, cuando intentes hacer algo que has visto hacer a otra persona, te parecerá que estás “copiando” y puede que no te resulte natural, pero persevera. Como un actor, tendrás que ensayar tu nuevo papel hasta que te salga natural.

Paso 4. Apóyate en los demás
Mientras trabajas en el desarrollo de tu liderazgo, puedes recurrir a otros miembros de tu equipo para que den un paso adelante cuando sea necesario. Fíjate en quién de tu equipo tiene las habilidades y los estilos que a ti te resultan especialmente difíciles, y anímale a tomar la iniciativa cuando su estilo sea más apropiado que el tuyo. Los mejores líderes crean otros líderes, no seguidores.

Paso 5. Haz algo diferente
Piensa qué estilo te resulta más difícil. Piensa cómo dirías las cosas si trabajaras en ese estilo y practica cómo las dirías. Busca formas de seguir sonando como tú, pero en ese estilo. Por ejemplo, a algunas personas les resulta más fácil dar órdenes si las hacen sonar con humor. Se trata de reconocer tu punto de partida y dónde quieres llegar.

Paso 6. Busca Feedback
Pide a los demás que te den su opinión sobre cómo se sintieron cuando te comportaste de distintas maneras. Puede ser difícil escuchar lo que dicen, así que no preguntes a menos que realmente quieras saberlo y recuerda no tomártelo como algo personal. Acéptalo y decide si quieres actuar en consecuencia o no.

5. RECURSOS ADICIONALES

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